¿Qué son los Pavimentos Flexibles?
Los pavimentos flexibles son recubrimientos asfalticos cuyas estructuras se flexionan de acuerdo al tráfico o a las cargas a las que sean sometidas. Por este motivo suelen ser usados en áreas con un alto flujo de tráfico como vías, aceras y parkings.
Para la elaboración de este tipo de pavimentos se realizan varias capas de material, de hecho, cada una se exponen a una misma carga, pero en diferentes niveles. Es decir, la carga a la que se somete este recubrimiento, se traslada a cada una de las capas inferiores que integran la estructura. De esta manera el pavimento tiene la capacidad de resistir la carga total a través de todas sus capas.
Cada una de las capas de los pavimentos flexibles, se ponen en orden descendente en capacidad de carga, siendo la superior la que tiene más resistencia ante el tráfico o las cargas. Como es lógico, la capa que menos capacidad de soporte tiene es la que está en la base de la estructura. En cuanto a su durabilidad, este tipo de suelo debería garantizar una eficiencia de al menos unos 8 años, aunque, por lo general, suele ofrecer una vida útil de 20 años.
Ahora, ¿qué son los pavimentos flexibles y cuáles son las características que reúnen? Es precisamente en lo que vamos a poner en relieve en este artículo.
Pavimentos flexibles: Concepto y principio de diseño
El pavimento flexible se puede definir como aquel recubrimiento que mezcla materiales asfálticos o bituminosos, colocados sobre un lecho de material granular compactado y superpuesto en capas.
Para crear un pavimento flexible, se trituran pequeñas piezas de piedra y se presionan juntas o se mezclan con un material similar al pegamento conocido como betún. El betún se calienta a aproximadamente 300 grados Fahrenheit (150 grados Celsius) antes de agregar la piedra. Luego, las máquinas colocan la mezcla en la carretera, creando el pavimento sobre el que circularán los coches o las personas.
Las capas de los pavimentos flexibles suelen ser
- Capa superficial o capa superior: Es la que entra en contacto directo con el pavimento sobre el que circulan las personas o los vehículos, y que normalmente ha sido diseñada con varias capas asfálticas.
- Capa base: Se refiere a aquella que se encuentra debajo de la capa superficial y está, usualmente, fabricada a base de agregados, de hecho, puede estar estabilizada o sin estabilizar.
- Capa sub-base: Está ubicada debajo de la capa base. Muchas veces se prefiere no estructurar el pavimento flexible con esta capa, porque se considera innecesaria.
El diseño de un pavimento flexible se nutre de un principio fundamental. Y es que, ante una carga de cualquier magnitud, la intensidad de la carga disminuye a medida que ésta se transmite hacia abajo desde la superficie, en virtud de extenderse sobre un área cada vez mayor. Llevándola, por último, lo suficientemente profundo en la superficie a través de sucesivas capas de material granular.
Características de este tipo de suelo
Los pavimentos flexibles han de aglutinar una serie de características que los diferencian de los pavimentos sólidos. Veamos cuáles son estos factores a continuación:
- Consiste en una serie de capas con materiales de la más alta calidad en o cerca de la superficie del pavimento.
- Refleja las deformaciones de la subrasante y las capas posteriores en la superficie.
- Su estabilidad depende de la trabazón de los agregados, la fricción de las partículas y la cohesión.
- El diseño del pavimento está muy influenciado por la resistencia de la subrasante. La resistencia a la flexión del hormigón, además, es un factor importante para el diseño.
- Funcionan por una forma de distribución de carga a través de las capas de componentes.
- Las variaciones de temperatura derivadas del cambio de las condiciones atmosféricas no producen tensiones en los pavimentos flexibles.
- Tienen propiedades de autocuración, debido a que las cargas de las ruedas más pesadas son recuperables hasta cierto punto.
Conclusiones
Los pavimentos flexibles, definitivamente, son capaces de soportar un alto flujo de tránsito y cargas bastante pesadas, gracias a su estructura basada en la formación de capas. Creando, de esta forma, todo un sistema unificado especialmente diseñado para resistir los tráficos más exigentes.
No es de extrañar que estos tipos de pavimentos se usen para actuar como los recubrimientos asfalticos de parkings, carreteras y aceras. Sobre todo, porque pueden ofrecer una vida útil de hasta dos décadas, lo que se traduce en ahorro de dinero a largo plazo y en un alto rendimiento garantizado.
En TRC Paint realizamos la instalación de estos pavimentos, asegurando la máxima eficiencia y una durabilidad de al menos 15 años. Todo ello, gracias a la dilatada experiencia de nuestro de expertos en la materia que le permite prestar atención a cada detalle durante el proceso.