¿Qué es y para qué sirve una pintura o barniz ignifugo?

¿Qué es y para qué sirve una pintura o barniz ignifugo?

Los incendios siguen siendo un peligro, sin embargo, la llegada de la  pintura o barniz ignifugo  ha permitido aprovechar un nuevo aliado contra el fuego, sobre todo para proteger elementos decorativos fabricados con madera.

Independientemente de los avances de la tecnología, diversos materiales (como la madera, por supuesto) aún pueden sufrir los efectos desastrosos derivados de los incendios. La protección contra los daños que las llamas pueden causar a los objetos (y a las personas), adquieren un papel primordial a la hora de decorar o construir una vivienda, edificio u oficina.

Podemos decir que, la  pintura o barniz ignifugo tiene la capacidad de proteger pasivamente los elementos de madera presentes en un inmueble. Ello significa que hace una importante contribución a la estrategia de prevención de incendios. ¡Veamos realmente qué es y para qué sirve!

¿Qué es la pintura o barniz ignifugo  y para qué sirve?

La pintura o  barniz ignifugo es un producto reactivo aplicable a la madera capaz de contener la penetración de las llamas en la madera, en caso de incendio. Contiene, además, aditivos ignífugos que le permiten reducir significativamente la capacidad de combustión del soporte de madera sobre el que se aplica.

Hablamos de productos que adoptan reacciones químicas destinadas a extinguir las llamas y limitar su propagación. La aplicación de pinturas ignífugas, por tanto, sirve para modificar la reacción del material en contacto con el fuego.

Ahora, ¿qué significa pintura ignifuga? El término deriva del latín ignis (fuego), y  fugo (que hace huir). La capacidad de este producto para crear un escudo protector, aislante, ralentizar el fuego y aumentar la temperatura, permite disponer de una protección de tipo pasivo.  Es decir, que a diferencia de los extintores y rociadores que intervienen directamente para apagar las llamas, esta pintura ralentiza el efecto destructor del fuego.

La importancia de aplicar este tipo de pintura en la madera

La madera siempre ha ejercido un encanto irresistible, especialmente en el mundo de la construcción. ¿Las razones? Bueno, es la combinación perfecta entre ligereza y resistencia, tiene fuertes capacidades antisísmicas y es el corazón de la bioarquitectura moderna.

Sin mencionar que aporta belleza a los ambientes en los que vivimos, pero desafortunadamente, su inflamabilidad siempre plantea preocupaciones desde el punto de vista de la seguridad.

El caso es que la pintura o barniz ignifugo puede retrasar el inicio de un incendio, salvando así vidas, y ralentizando el encendido del fuego. Todo ello, gracias a que:

  • Retarda la propagación de las llamas.
  • Limita la emisión de gases tóxicos.
  • No altera las virtudes de la madera, respetando todas las necesidades estéticas y de diseño para un efecto final extremadamente refinado
  • Ofrece una infinita gama de efectos especiales, colores, finos acabados, combinando elegancia y ductilidad.

En definitiva, la pintura o barniz ignifugo permite retrasar la combustión de la madera dada a la creación de una capa protectora cuando las llamas entran en contacto con los elementos de madera.

¿Qué es y para qué sirve una pintura o barniz ignifugo?

Diferencia entre pintura ignífuga y pintura intumescente

Existen dos niveles de protección diferentes según el tipo de pintura intumescente ignífuga que elijas para tus espacios. Entonces, descubramos la diferencia entre una pintura ignífuga y una pintura intumescente la cual radica principalmente en la composición química.

  • La pintura o barniz ignifugo contiene aditivos ignífugos o pirorretardantes mientras que la pintura intumescente contiene aditivos intumescentes.
  • En presencia de altas temperaturas (entre 200 y 300 grados centígrados), los aditivos ignífugos liberan sustancias que inhiben el oxígeno desarrollando vapor de agua o dióxido de carbono. De esta forma consiguen bajar la temperatura de combustión.
  • Si la temperatura alcanza entre 300 y 400 grados las pinturas ignífugas inician un proceso de cristalización, creando una capa vitrificada no inflamable que crea una barrera para la madera.
  • Por otro lado, las pinturas intumescentes a 200°C reaccionan hinchando la película de pintura y creando una barrera aislante protectora que retrasa tanto la combustión como el aumento de temperatura.
  • En general, las pinturas ignífugas se utilizan en materiales de decoración, mientras que los aditivos intumescentes, estéticamente poco transpirables, se utilizan para tratar estructuras portantes de madera, hierro o mampostería.

Conclusiones

La madera es uno de los materiales más extraordinarios que ofrece la naturaleza. Ya se trate de estructuras o de mobiliario y revestimientos (paredes o suelos), no existen límites a las características de ductilidad y resistencia que la madera puede garantizar y permitir alcanzar.

Sin embargo, también hay que tener en cuenta la seguridad, como prevenir el riesgo de incendio y minimizar sus efectos utilizando los mejores dispositivos posibles. He aquí donde pintura o barniz ignifugo sirve de muchísima ayuda.

¿Cómo lo hace? La pintura ignífuga al percibir los 200° y 300° de temperatura, libera sustancias que inhiben el oxígeno y desencadenan un proceso de vitrificación. Es decir, producen una capa aislante compacta que crea una barrera y que evita el aumento de temperatura, impidiendo el paso de las llamas por más tiempo.

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